Cuando hablamos de las palabras Raport o Egregor hacemos referencia a las ligas que se generan con entidades ya definidas o entidades creadas, estas pueden ser elementales o elementarios, pueden ser creadas por la mente y la energía sexual.
Para las inteligencias o entidades ya creadas como los 4 elementos o elementales que son las inteligencias de la naturaleza, el Raport nos liga al aspecto negativo de estas inteligencias y el Egregor al aspecto positivo. En una dependencia adictiva (por ejemplo adicciones a sustancias estupefacientes) estamos generando un vínculo con el aspecto negativo de la naturaleza, como resultado de esto se crea un Raport. Si nos conectamos con el aspecto constructivo de la naturaleza este vínculo se convierte en un Egregor, de este modo podremos recibir una instrucción por parte de ella de acuerdo al elemental con el cual tengamos esta conexión.
Hay inteligencias que se van formando en nosotros según nuestro desarrollo sicológico, energético y espiritual, estas también las conocemos como entidades. Las entidades creadas con el mal uso de nuestra energía sexual nos inducen a seguir en esos mecanismos de degradación, porque ellas se alimentan y viven a través de esos ciclos viciosos. Los Egregor son esas inteligencias que vamos generando a medida que nos desarrollamos espiritualmente y que sirven como intercesores con la naturaleza, estos seres o inteligencias se desarrollan en los curanderos y magos como es el caso del intercesor elemental; son inteligencias que se van formando con el desarrollo de la experiencia y quienes están como armaduras para protegernos de otras fuerzas.
Para el caso del Ego no se define de esa manera porque él forma parte directa de nuestra alma como su cara negra, que en su transmutación se convierte en conciencia; pero el Ego sí tiene la capacidad de crear Raports, como la conciencia de crear Egregors.
(Imagen de Johfra Bosschart)